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17 marzo, 2015

Danza Montañés - 3 (2007)


El palotiau

 Palotiau del Grupo Folklórico Alto Aragón el día de San Juan de 1998.

           Al mismo tiempo que todo esto sucedía, el Grupo Alto Aragón que tanto interés había mostrado en recuperar el dance de castañuelas, se hace presente en el palotiau. Por una parte lo introduce de manera cotidiana en sus espectáculos llevándolo por todo el mundo, y por otra llena las lagunas que a finales de los 70 los danzantes antiguos del palotiau habían dejado (citas de Trinidad y de San Juan).

 Los danzantes del Grupo Alto Aragón ejecutan La Cruz en el Coso.
Archivo L. Salesa, M. Tomeu. Año 1998

 Sus investigaciones en torno a los instrumentos del dance, así como sus melodías le hacen ganarse un protagonismo que ya no abandonarán. El grupo de palotiau formado por este núcleo se introduce desde entonces en la procesión general del día de Santa Orosia y su colocación delante de cualquiera de las otras dos urnas anima y contribuye a un mayor realce de la misma. Su presencia en las salidas del día de la Trinidad y del día de San Juan lo hacen imprescindible.

  Palotiau del Grupo Folclórico Alto Aragón. De pie: Joaquín Antoni, Alejandro Borau. Daniel Tesa, Jorge Sebastián, Luis Salesa (músico), Gabriel lndave, Juanjo Fernández, Fernando Cantabrana. José Antonio
lndave, Xabié Visús, Miguel Angel Bescós, Javier Arto, Julián Pardo: agachados: Jorge Antoni, Jaime Antoni, David Arbués y Andrés Raigón. Año 2006. Foto Barrio.
Son muy numerosos los danzantes que por este grupo han pasado, y no sólo aquellos que pertenecían al propio grupo folclórico, por el contrario han participado todos aquellos jóvenes jaqueses que han visto en él la manera de integrarse y participar en la fiesta de la Santa. En la actualidad, Luis Salesa y Joquín Antoní se encargan de su organización y enseñanza.

Participantes con el Palotiau del G.F. “Alto Aragón”

Alejandro Borau Betrán. Desde 2001
Alvaro Gairín Rabal (finales de los 80 a 2002)
Luis Sánchez Aso
Antonio Jorge Laín Pardo. Desde 2002
ChabierVisús Cirés. Desde 2002
Chusé Antón Indave Oliván. Desde 2002
Cristián Ramón Gracia. Desde 2001
Fernando Estallo Garcés (finales de los 80 a 2002)
Joaquín Antoni Buesa. Desde 1992
José Manuel Visús Lanuza. Desde 2002
José María Palacio Albertín (1999-01)
Juan Carlos Palacio Albertín (1999-01-02)
Juan José Fernández Gastón. Desde 1996
Julián Pardo Ara. Desde 2000
Miguel Angel Bescós Salas. Desde 2000
Sergio Sánchez Lanaspa. De 1998 a 2003
Miguel Estallo Jaca. 2002
David Betrán
Juan Alonso Arroyo
Rafael Pérez
Alejandro Pérez Ara
Gabriel Indave
Javier Arto Hijós
Jorge Sebastián Ramos
Daniel Tesa Betés
Andrés Raigón
Jorge Antoni Millán
Jaime Antoni Millán
David Arbués Espinosa
Diego Gairín Pueyo

            DANZA MONTAÑÉS
            Manuel Tomeo Turón y Guzmán Fernádez Barrio           
            Págs.: 58, 159, 160, 166, 315.

Edición y diseño: Pirineum editorial
Tel. 974 355386 - www. pirineum.es
C./ del Carmen, 4, 1º izda., 22700 JACA
ISBN: 978-84-935061-4-8
Depósito legal: Z-4084-2007


11 marzo, 2015

Danza Montañés - 2 (2007)

Año 1979: Recuperación actual. Os Bailadós

Fue para el día de Santa Orosia de 1979 cuando se recuperó por última vez y de manera “definitiva” el dance de castañuelas.

La historia de su recuperación fue protagonizada por el grupo local “Alto Aragón”, que nacido cuatro años atrás, tenía y tiene entre sus objetivos el hacer renacer de su olvido y difundir todo el legado musical, folclórico y etnológico, que la cultura tradicional montañesa nos ha transmitido. El dance de castañuelas de su ciudad fue uno de sus primeros objetivos.

Su proceso de recuperación, todavía inconcluso, no resultó nada fácil: Hacía cincuenta y siete años que nada se sabía de él, a excepción del período de posguerra; la memoria colectiva de la gente ya no lo tenía en su recuerdo, el apartado musical estaba muy debilitado, faltaban los instrumentos originales, etc.
D. Juan Francisco Aznárez, canónigo archivero de la Catedral, fue personaje clave en todo este proceso. Sus escritos del año anterior despertaron la curiosidad de varios miembros del grupo “Alto Aragón”13. Sus conversaciones, sus consejos y la presentación de los trajes antiguos, que todavía se encontraban (y se encuentran) en viejos armarios de la Catedral fueron los elementos de partida de todo este proceso de recuperación.

13Podernos citar con la intención de no dejarnos a ninguno a Enrique Lope, Julio Lain, Enrique Tello, Enrique Muñoz, Ángeles Rubio, Antonio Gairin, Ismael Paños y Javier Angel-Alberola.

Más adelante vendrían las charlas con antiguos bailadores, destacando la de Joaquín Jame Ara (1907-2001), de la ‘huerta Villa María”, que fue básica para todo el montaje de los primeros pasos. A su vez, la aparición de dos fotografías de los bailes antiguos ayudaría a concretar más detalles: disposición espacial, estética del conjunto, posición de los brazos, etc.

Pero junto a todo ello faltaba un aspecto fundamental que había que investigar y del que había muy poca información. Se trataba de las melodías que debían acompañar a los bailes y los instrumentos que las debían interpretan Gran parte de esta tarea fue realizada por Enrique Tello, actual músico de las castañuelas y un miembro más de aquel grupo. Uno a uno fue entrevistando a los antiguos músicos todavía vivos, intentando reunir un “corpus” musical lo más amplio posible.
Todo ello se realizó en una época en la que todavía “estas cosas” no estaban muy de moda y resultaba extrañísimo hablar de “palotiaus’, salterios y otros cantos y bailes que no fuesen la “oficial” jota. Ni siquiera había constructores de instrumentos a los que recurrir para la realización de las réplicas. Tanto es así, que las primeras flautas se trajeron de Francia, gracias a la relación existente entre los grupos folklóricos “Lou Ceu de Pau" y “Alto Aragón’, coincidentes en numerosas ocasiones en actuaciones tanto en un pais como en otro.


“…partíamos de cero y había muy poca información, era una época que se iba mucho por Francia y coincidíamos con grupos franceses que utilizaban tanto el salterio como la flauta. Es a través del Grupo ‘Lou Ceu de Pau” que se es encargó la primera flauta de tres agujeros..’


(Entrevista con Enrique Tello Rabal, n. 1960)


Se trata, en todo caso, de un proceso abierto e inacabado. Cada año van surgiendo pequeños cambios que mejoran el resultado final. La simplicidad de unos primeros bailes se ha convertido en coreografías más complejas y espectaculares que dan mayor vistosidad a los mismos. Unas veces han sido modificados los criterios de cómo avanzar o cómo retrasarse durante la procesión para no interrumpir la marcha de la urna principal. Otras, ante la recuperación de una melodía, se ha optado por crear una nueva coreografía, procurando no modificar el estilo y carácter de las ya existentes.
En un primer momento, algunos de estos bailes se denominaron con némeros: “el dos”, ‘el tres”.., a semejanza de algunas mudanzas del palotiau. En la actualidad, los nombres de las distintas danzas hacen relación a diversos elementos destacados del culto a Santa Orosia:’Mantos”, “Romeros”, ‘Yebra”, ‘Cruceros”, etc.


Por otra parte, este mismo proceso de ampliación y mejora del dance lo encontramos en la indumentaria. Con el paso del tiempo se han ido confeccionando hasta tres nuevos grupos de trajes, buscando una mayor similitud con los antiguos. Añadiendo, últimamente, algunos complementos que faltaban: pañuelo o mantoncillo cruzado al pecho y ‘pulgarillas” o castañuelas de boj en el año 1996; "bonetes montañeses” en el año 1998 y "vistosas ligas" en 2000. Todo ello según las referencias tanto gráficas cómo documentales que se poseían.

No ha faltado mejora en lo que es el distintivo del dance: las castañuelas. Fue en el año 1996, cuando se cambiaron las más convencionales por otras más artesanales, en boj y réplicas de los modelos antiguos. Asimismo, vemos modificado el número de bailadores, que si tradicionalmente había sido ocho (o dieciséis), en la actualidad llegan a participar durante la procesión diez, doce o hasta catorce de ellos; siempre conservando la tradicional composición de ‘a ocho”, en los bailes de "plaza”.

Por último, cabe destacar que se ha determinado que la denominación más propia para cada uno de los componentes sea la de "bailador” y ”os bailadós” a "los bailadores de Santa Orosia” para el conjunto del grupo. Ello no implica que en determinados contextos sigan denominándose "danzantes”, pues lo son, pero ante la duplicidad y equívoco del nombre con los que interpretan el "palotiau”, se ha adoptado esta última solución.

Solución nada extraña y artificiosa, pues durante todo el siglo XIX y hasta su interrupción en 1921 así se les denominó popularmente: bailadores de Santa Orosia o bailadores de la Santa. El hecho de especificar-los en aragonés (“os bailadós’),obedece al deseo de reivindicar nuestra antigua lengua, así cómo al hecho cierto de ser así como eran nombrados nuestros danzantes mientras la lengua aragonesa fue común en esta tierra.

Con todo ello, el resultado ha sido un conjunto de un carácter muy definido y que ya resulta “reconocible” tanto para los propios de Jaca como para los de fuera, Un conjunto de bailes que lentamente van creando un “poso” que lo han convertido en una tradición plenamente integrada y consolidada.
Esta solidez viene marcada, sobre todo, por la continuidad de los intérpretes, pues algunos permanecen desde 979; así como por la constante tutela del grupo “Alto Aragón” del que proceden todos ellos.

4ª Época: Siglo XX (1979 - 2004 Grupo Folklórico “Alto Aragón”)
Alberto Rodríguez Gutiérrez             1989... (en activo)

Alvaro Gairín Rabal                           1979 a 1987
Antonio Gairín Rabal                        1979 y 1980
Carlos Eíto Araguás                           1990 aprox.
Carlos Puértolas Morláns                   1979y 1980,y 1982a 986
David Rodríguez Gutiérrez               1989 a 1991 y 1998... (en activo)
Enrique Lope López                          1979 a 1982
Enrique Muñoz Burillo                      1979 a 1986 y 1988
Eduardo Jaca Pérez                           1993
Fernando Estallo Garcés                    1979/1981-1983 a 1986 y 1988
Francisco Betés López                       1979... (en activo)
Guzmán Fernández Barrio                 1980... (en activo)
Ismael Paños Grasa                            198l a 1986
José Antonio Muñoz Burillo              1983-85-87-88-90-91-93-94-95 y 97
José Alastuey Anaya                         1997... (en activo)
José Javier Eíto Aragüás                    1999... (en activo)
José María Palacio Albertín               2000... (en activo)
José Ramón Salvador Gutiérrez        1989... (en activo)
Juan Carlos Palacio Albertín              2000... (en activo)
Julio Laín Ascaso                               l979 – 1981... (en activo)
Luis Sánchez Aso                              l986-1988-l989 y 1997
Manuel Tomeo Turón                        1986 a 2006
Marcos Lera Juan                               1989-90-94-95-97 y 1998... (en activo)
OscarTesa Jame                                 1990 a 1996
Ramón Reiné Viñales                        1980 a 1983 y 1985
Roberto García Bartolomé                 1989 y 1990
Santiago Calonge Pradillo                 1987... (en activo)
Sebastián Langa Arranz                     1999... (en activo)
Valentín Puértolas Gil                       1989

DANZA MONTAÑÉS
Manuel Tomeo Turón y Guzmán Fernádez Barrio
Los bailes de castañuelas Págs.: 107, 108, 109, 110, 310

Edición y diseño: Pirineum editorial

Tel. 974 355386 - www. pirineum.es
C./ del Carmen, 4, 1º izda., 22700 JACA
ISBN: 978-84-935061-4-8
Depósito legal: Z-4084-2007

08 marzo, 2015

Un libro que nos toca de cerca - 2007


Pirineum editorial publica en 2007 “DANZA MONTAÑÉS” elaborado por Manuel Tomeo Turón y Guzmán Fernádez Barrio, ambos componentes de nuestro Grupo “Alto Aragón”. Sale a la luz después de más de diez años de trabajo, escudriñando sobre todo en los archivos locales (municipal, diocesano, semanario El Pirineo Aragonés, La Unión, …) además de otros provinciales y regionales, recopilando fotos entre las colecciones de los fotógrafos locales y provinciales pero también por baúles y falsas de antiguos danzantes o músicos.
Según la nota introductoria en que la Editorial presenta la obra “es un libro de referencia de los dances de Jaca y del folklore y la música pirenaica en general” y más adelante “una auténtica antología de la fotografía “Orosiana” ”.
Traemos hoy este libro por múltiples razones:
-          Desde que comenzó el Grupo nos planteamos aprender parte del folklore del Pírineo aragonés y entre otras el “Paloteao de Jaca” ocupaba uno de los primeros lugares. Posteriormente aprendimos-recuperamos el Dance de Castañuelas, 1979, que se hace hasta la actualidad.
-          Entre los muchos, muchisimos protagonistas que en él se citan, hay un número importante de componentes de nuestro Grupo por su participación en los dances, música, pendón,…
-          Si las circunstancias anteriores no se dieran, sería justo hacer mención de la obra por su temática, por su interés y por su coincidencia no sólo temática sino también espacio-temporal.
-          Por último y con permiso de Manuel y de Guzmán, por que lo sentimos como nuestro. Ellos lo trabajaron y con su esfuerzo salió a la luz, pero también es nuestro, como hacemos nuestros, los éxitos que vivimos en su día, los premios o menciones que el Grupo recibe en la actualidad, aunque algunos los veamos desde la barrera y los reconocimientos que antiguos componentes reciben, sobre todo cuando mencionan desde el corazón su pasado folklórico.
     Será esta entrada la primera de una serie en las que iremos sacando citas y pequeñas retazos que dejan constancia del trabajo individual o coletivo del Grupo reflejado en esta obra.
     Invitamos a toda persona que lea esta nota a leer el libro ya que es un gran aporte para el conocimiento de algunos aspectos de Jaca, del dance y del folklore. Cómo no, agradecemos a Guzmán y Manuel su valioso trabajo.

Nota introductoria de los autores:

El título “Danza Montañés”, es parte del “Diálogo” en honor de Santa Orosia” que Juan Francisco Aznárez dató en el siglo XVII.

“Danza montañés, danza.
Danzaremos cosa viella y,
si a mudanza les cuaca,
verez cómo Santa Orosia
me da a yo luego as gracias” 
Pág. 279
Álvaro

Foto de portada: Francisco De las Heras
Edición y diseño: Pirineum editorial
Tel. 974 355386 - www. pirineum.es
C./ del Carmen, 4, 1º izda., 22700 JACA

ISBN: 978-84-935061-4-8
Depósito legal: Z-4084-2007

16 marzo, 2013

Querido Labordeta - Joaquín Carbonell


Puesto así, podría ser el anuncio de algún concierto o actuación de ambos cantautores en cualquier lugar, próximo o lejano de los innumerables que realizaron a lo largo de su dilatado recorrido. “Querido Labordeta”, es en esta ocasión el título del libro biográfico que escribe Joaquín Carbonell, el que fuera su alumno en los tiempos del Colegio San Pablo de Teruel, pero sobre todo compañero en tantas actuaciones y por encima de todo amigo intemporal, que a pesar de algún breve distanciamiento se mantuvo a lo largo de los años, afianzando su amistad y permaneciendo muy cerca hasta su fallecimiento.
Traigo a este blog este libro para citarlo y publi-citarlo (por qué no), por lo que nos ayudó su protagonista, lo que compartimos y sobre todo por que nos honró con su amistad.
           Leerlo ha supuesto una remembranza de tantas cosas. Personajes, lugares y sucesos, los veo próximos, muchos por haber sido figuras muy conocidas de la cultura, del aragonesismo o de la canción. Unas pocas por haberlas tratado personalmente e incluso por haber hecho amistad con ellas y compartido vivencias o viajes.
           Su vida fue tan activa, variada e intensa, que el número de personas, relaciones y lugares es casi interminable. Aún así a nuestro Grupo se le cita en el libro, lo que siendo prácticamente irrelevante dentro del conjunto, nos enorgullece que quede constancia de que compartimos medios de transporte, escenarios además de anécdotas y diversiones.
Diseño de portada, Estudio Ediciones B
Imagen de portada basada en la fotografía de Ángel de Castro

“El Ministerio de Asuntos Exteriores se dirigió al recién nombrado consejero de Cultura para proponerle un viaje a Nueva York. Para el Pilar, una embajada de buena voluntad y mejor disposición se embarcó en una gran nave alada, rumbo a la ciudad de los rascacielos. Labordeta fue uno de los seleccionados para llevar hasta allí las esencias originales y autóctonas de una tierra llamada Aragón. A Labordeta le acompañaron los grupos Alto Aragón, de Jaca y Baluarte Aragonés, referencias indispensables de nuestro brío y nuestra jota.” (pág. 265)

“José Antonio y su banda accedieron encantados, como una invitación a disfrutar de unas vacaciones en la ciudad más importante del mundo. Los chicos del Alto Aragón lo recuerdan así: “Sería un viaje con José Antonio Labordeta y su grupo de músicos, y por si fuera poco, los gastos a cargo de la DGA. Por aquél entonces Labordeta ya era famoso en Aragón, y nosotros nos conocíamos casi todas sus canciones, además ya habíamos realizado una actuación en el Colegio Mayor San Juan Evangelista de Madrid con ellos y posteriormente efectuaríamos una gira por Marruecos, también los dos grupos”.
Se daba la circunstancia de que en esa agrupación folclórica había un joven Mario Garcés, que con el tiempo, en 2011, alcanzaría el grado de Consejero de Economía en el Gobierno de Aragón, con el PP, con doña Fernanda Rudi como presidenta. El consejero puede presumir de haber acompañado con su bandurria a Labordeta en Nueva York…” (págs. 266-267)

“Javier Inglés recuerda que la estancia fue muy placentera y divertida, sin apenas compromisos, con tiempo para ver la ciudad y en un ambiente de franca camaradería con los integrantes del grupo Alto Aragón: “A los conciertos venían casi exclusivamente españoles. Pero una vez dimos uno en una universidad, en el salón de actos del Essex Country College de Newark, y en primera fila había un negro, un espectador negro. Labordeta emprendió el Arremójate la tripa, que como sabes tiene una estrofa que dice “Los hijos de la Miguela se han ido a la emigración, / uno trabaja de negro y otro de indio en un salón”. Al llegar a esa estrofa, José Antonio se dio cuenta de que esa expresión podía molestar al espectador de primera fila y echó mano sobre la marcha de un chiste que nos contaba a menudo: el de dos cazadores que presumen de sus hazañas; uno caza leones y el otro confiesa que caza “una cosa pequeña y negra, un wanamino”. “¿Qué es un wanamino?”, le pregunto el primero. “Un bicho que cuando le fui a disparar me dijo: “¡Wana, a mí no, a mí no!” Labordeta soltó sobre la marcha: “Uno trabaja de wanamino y el otro de indio en un salón”. Los músicos casi se pararon de la impresión”. (pág. 267)

Si Javier Inglés dice que “la estancia fue muy placentera y divertida" y hubo “un ambiente de franca camaradería”, casi podría asegurar que nosotros, los componentes del Grupo lo vivimos del mismo modo. Si no recuerdo mal, en el hotel de la calle 44 coincidimos el Ballet de María de Ávila, los de La COME y nuestro Grupo. Como l@s componentes del Ballet de María de Ávila eran disciplinados, ordenados y por supuesto se cuidaban muchísimo, nosotros hicimos especial amistad con los de La COME, con los que coincidíamos en horarios y aficiones. La COME, como los llamábamos nosotros, aunque al parecer el nombre correcto era La COOME (como la llamaba Labordeta, con dos oes (pág. 272)), era La Cooperativa Musical del Ebro y era el grupo de músicos que le acompañaban. Por lo menos para mí eran cinco, aunque leyendo el libro, Javier Inglés ya acompañaba a José Antonio desde 1979 como técnico de sonido y en estos viajes y unos cuantos años después siguió haciendo este trabajo. Así pues eran además de Javier, Iñaki Fernández, Paco Medina, Juan Carlos Fernández y Ángel Vergara.
Iñaki, de Monzón, tocaba el bajo eléctrico, (seguramente junto a Paco M. eran los que llevaban más tiempo) y era un enamorado de los Beatles. Siempre que tenía ocasión tocaba alguna canción de este grupo y por supuesto sabía cantidad de datos y anécdotas de los mismos. Nos invitaron a hacer un recorrido turístico por Manhatan y entre otros lugares pasamos frente al edificio Dakota, lugar donde se había filmado la película “La semilla del diablo” entre otras, pero también en cuya puerta habían asesinado a John Lennon tres años antes y que Iñaki nos citó con rapidez.
Paco Medina, guitarra, ya acompañaba a José Antonio con Luis Fatás y Pedro Savirón, habiendo participado en la grabación del disco “Las cuatro estaciones” y gran número de recitales.
Juan Carlos, Juanito para los próximos y desde entonces para nosotros era el batería, nacido en Luesia, era sin duda el más jovial y divertido. Después formaría parte del grupo IXO RAI. Según el libro su voz empastaba muy bien con la de Labordeta (pág. 262) y solía conducir la furgoneta cuando estuvo con ellos (pág. 291)
Ángel Vergara, era al parecer el último que se había incorporado con una gran habilidad para todo tipo de instrumentos de viento, sobre todo, flautas, dulzaina, gaita de boto, pero también acordeón y otros instrumentos. Es el que más he visto desde aquellas fechas, “haciendo bolos” hasta la actualidad, acompañando a cabezudos, en mercadillos medievales, formando parte de “Os músicos das cambras”, representando un espectáculo llamado “Falordias y Juglares”, en fin, siempre ligado a la música, al espectáculo y con un trato muy agradable y amistoso desde que coincidimos en esos viajes.
Os recomiendo su lectura a pesar de su grosor, sobre todo si érais jovencit@s en los 70.

Datos del libro – 501 páginas
1ª edición: septiembre 2012
© 2012 Joaquín Carbonell
© Ediciones B,S.A., 2012
Consell de Cent, 425-427 08009 Barcelona (España)

Álvaro